¡Grande Alberto!

Ayer me junté con mis amigos los voluntarios del calle niño Antofagasta, para esperar la canonización del Gran Alberto, quedamos de juntarnos a las 10, como nunca llegué puntual, bueno no tanto (llegue a las 10:10), ahí estaba el Fabián (piporra), el Pedro (peter) y la Sandra, después llegó la Katy, la Sonia, la Ale, la Claudia y su marido. Eran ya las 11:00 mas o menos y entramos, yo pensaba quedarme un ratito, pero fueron pasando los minutos y ya ni sueño tenia y como dijo Joaquín Sabina, “y nos dieron las 10 y las 11, las 12 y la 1, las 2 y las tres…” y ya estaba embalado, sin querer estaba haciendo la vigilia para la canonización, dejé mis prejuicios de lado, mis ideologías y mi postura, esa noche solo importaba El Gran Alberto Hurtado, no el sacerdote, sino la persona, se podrá decir que la canonización se transformó en un producto, que se farandulizó como todo, que la iglesia católica está llena de defectos, que quizás ni siquiera exista un dios, todo eso se podrá discutir, pero ayer sábado solo importaba El Gran Alberto y su obra, y lo que hice ayer fue agradecer de manera simbólica todo lo que me enseñó con sus palabras y sus obras, de verdad es “el ejemplo” a seguir, para tener un “Chile mas justo”, como él soñaba.
Eran ya como las 2 y media y salió un viento mas helado que “cachete d foca”, como dijo el Fabián, estábamos que nos íbamos pero nos quedamos, para esa hora ya se había ido la Ale, la Claudia y su marido, el show de espera estuvo bien variado, desde un simpático cantante peladito, con un repertorio digno de la familia Flanders (perfectirijillo) (pero respetable), hasta un show circense con fuego y luces.
3:30 mas o menos y nos dio el respectivo bajón, el Pedro y la Sandra se fueron a comprar unos jamón-queso, porque pensaban que ya no quedaban completos, el Fabián y yo fuimos por siaca, a ver si había completo, y la cueita quedaban completos, eso si que estaban mas helados que “cachete e foca”, pero igual nos salvó el bajón.
A punta de cafes y tallas llegamos a las 4:30, que era la hora que partía el “Show” televisivo, bueno de ahí es cuento conocido, banderas chilenas en la plaza san pedro, el amigo benedictino dando el vamos a la misa y la imagen del gran Alberto Hurtado Cruchaga.

Gracias amigo Alberto por mostrarme el camino, ahora solo me falta recorrerlo de la mejor manera.
Espero que muchos lo vean como ejemplo, espero que lo conozcan así como lo conozco yo, y que sus palabras sean de verdad un manual de la vida(olvídense que pertenece a una iglesia o pensamiento puntual, eso no es conocerlo).
Actuemos, no solo critiquemos, si es re fácil criticar a las instituciones y denunciar algún mal acto de los políticos o persona en particular, es super fácil ser parte del problema, lo difícil es resolver el problema desde tu acción…
…no es imposible.

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